La libertad, como sentido interno de la persona, dentro de nuestra sociedad, es-tá dando un cambio en su comprensión. Quizá se muestra más, como un “falso prototipo” de vivir la autosuficiencia y el no querer mirar alrededor nuestro.
La celebración de la Virgen de la Merced el día 24, puede ayudarnos a ver qué libertad nos ofrece realmente Jesús. La advocación de María de las mercedes o libertadora de cautivos, pro-viene de la aparición de la Virgen a tres personajes muy diversos: San Pedro Nolasco, al rey Jaime I de Aragón y a San Raimundo de Peñafort, los cuales recibieron la encomienda de fundar una orden para la re-dención de cautivos. ¿ Cuantas esclavitudes, vendidas como libertades, nos atan en nuestro mundo?
Solo Dios nos libera de verdad. Al joven Leví, lla-mado luego Mateo, que celebraremos el miércoles, Jesús le liberó de la esclavitud del engaño, haciéndole apóstol de la verdad. Una conversión que hace desprenderse de todo, para ganar “el Todo” del Reino de Dios.
La libertad plena, pasa por seguir la huellas del Maestro, haciéndonos los servidores o esclavos de Dios, para vivir las aptitudes del Reino en la Bienaventuranzas; felices seremos cuando vivamos, por y para el Reino del Dios vivo en Jesús.
870 (Copia en conflicto de Juanjo Fuentes 2022-09-19)